Esta EN B baja tiene rendimiento que le da personalidad y chispa, dice Marcus King
La Knight 2 es la segunda encarnación del parapente EN B bajo del fabricante esloveno Triple Seven. Se ubica entre la Pawn (EN A) de iniciación y la Rook 3 (EN B alta) que fue actualizada el año pasado. La nueva Knight está «diseñada para inspirar confianza» en pilotos que avancen de su primera ala y empiecen a volar distancia. Ya se le unió la K-Light 2 que comparte el mismo diseño básico pero está hecha con materiales ligeros. Probamos la versión convencional.
Primera impresión
Cuando abres el ala por primera vez, queda claro que la Knight 2 está emparentada con la Rook 3. Tiene una construcción similar, con las mismas bocas y líneas optimizadas.
También tiene el diseño de colores convencional de Triple Seven con un solo color en la vela, aparte de las franjas de color opuesto en las puntas. El intradós es del mismo color que el extradós, por lo que la K-Light 2 se distingue fácilmente por su intradós blanco.
Según Triple Seven, el diseño simplificado permite tener solo las costuras necesarias para darle la forma a la vela, lo que contribuye al rendimiento. De hecho, cuando se mira la vela es obvio que los diseñadores de Triple 7 tenían el rendimiento en mente cuando tomaron decisiones de diseño.
Por ejemplo, tiene una nariz de tiburón bastante pronunciada, con dos varillas razonablemente cortas. También tiene más cajones de los que tienen habitualmente alas de esta clase: 54 comparados a los 48 de la Buzz Z6 de Ozone, 47 de la Atlas 2 de Gin y 51 de la Ion 6 de Nova, por ejemplo.
El alargamiento es casi el mismo que el de las demás con 5,2, un poco menos que la Knight original. En la parte posterior, tiene las ahora omnipresentes minicostillas. Todo hace que se vea muy lisa.
Líneas y bandas
Triple Seven cambió de Dominico D30 a Porcher Skytex 38 en la nueva Knight 2. Los cajones adicionales y otros cambios hacen que pese un poco más, de 5,2kg a 5,3kg en la talla ML que volé. Es más pesada que la Buzz y la Ion y parecida a la Atlas 2. La vela se siente duradera y si el peso es importante para ti, cambiarte a la K-Light 2 te permitirá ahorrar 1,2kg.
Cuando abres la vela, verás que Triple Seven optimizó las líneas en busca de rendimiento. Cuestionaría esa decisión para una B baja, porque las líneas sin funda pueden ser complicadas de manipular. Sin embargo, fue bueno ver que siguen usando líneas con funda en las A y las B, que son más fáciles de manipular y son de colores diferentes.
El estabilo también es fácil de encontrar, por ser rojo vivo mientras que las demás B son amarillas. Mientras tanto, las líneas traseras principales no tienen funda y a medida que subes hacia donde la línea se divide, son muy delgadas. Me pareció que se enganchan más fácil que otras, pero no tuve problemas de enredos.
Las bandas están hechas de cinta y tienen buenos acabados. Puede que sea la primera en tener un verdadero sistema de pilotaje con las bandas B/C con una parte acolchada en la banda trasera para halarla. En vez de tener una banda B flotante, Triple Seven optó por usar bandas convencionales pero con una línea de Dyneema que pasa por aros metálicos y un aro de cerámica. Cuando halas la banda C, también afecta a la B. (Ver pág. 24).
A pesar de parecer complicado, el sistema tiene la ventaja de que cualquier estiramiento del Dyneema no afectará el calado del ala cuando no se acelere. Triple Seven también afirma que su sistema evita que la banda se gire, lo que puede generar fricción adicional y por ende, desgaste. La cuerda puede reemplazarse y el ala trae una de repuesto. Si quieres simplificar las bandas, puedes desinstalar la mayor parte del sistema – quedaría la parte acolchada en las bandas traseras y el aro de cerámica.
Las bandas tienen poleas Harken de buena calidad en el acelerador. Las asas de freno se fijan con un imán direccional. Las asas en sí mismas están bien acolchadas y tienen espacio para meter y sacar la mano. Se siente que toda el ala tiene acabados de alto nivel.
Despegue
La vela se tarda un poco en llenarse de aire cuando quieres que se arme en barrera, quizás por las bocas pequeñas. Después, requiere un tirón constante para que suba a la vertical. Si las sueltas demasiado pronto, me pareció que es mejor empezar de cero.
No es un ala que subirá rápido a la vertical y te tomará por sorpresa, sino que sube ininterrumpidamente. Un día con viento rachado, me pareció de gran ayuda y el ala subió relajada. Una vez a la vertical, no tiene tendencia a adelantarse y es muy fácil de controlar.
En vuelo
Lo primero que noté fue lo directos que son los frenos. Reacciona casi de forma inmediata – impresionante para un ala de este nivel. La Knight original tenía bastante alabeo y pareciera estar más controlado en la Knight 2, pero sigue respondiendo rápido al frenado.
Después de los primeros 15cm, la presión aumenta para que no te excedas. Pero solo necesitarás esos primeros 15cm para girar en térmica, a menos que sea un núcleo estrecho. El aumento de presión tranquilizará a los más novatos porque es señal de precaución.
Al entrar a una térmica, no tiene tendencia a retrasarse sino que entra en la ascendencia sin acelerarse como algunas de mayor nivel, algo que los pilotos con pocas horas pueden hallar desconcertante. El cabeceo está controlado. Una vez adentro y girando, requiere muy poco pilotaje, incluso en térmica fuerte.
Durante el primer vuelo, estaba tomando fotos con los frenos en una mano y fue relativamente fácil mantenerla dentro de la térmica. Desde luego, es algo que no recomiendo y mantenerse activo con el freno del lado externo mantendrá la vela con mejor presión. A lo que me refiero es que es relajante mientras subes. Funciona muy bien en condiciones suaves o fuertes y me pareció fácil remontar en mi zona de vuelo, incluso en días en los que estaba estable más abajo.
En transición
En planeos se nota que el ala no rebota contra la turbulencia sino que la atraviesa bastante bien para un ala de este nivel. El acelerador es fácil de usar y el planeo solo se deteriora cuando va polea con polea.
Durante nuestro típico vuelo local, volé tranquilo acelerado a 50% que me dio un buen equilibrio entre velocidad y rendimiento. El sistema de pilotaje con las bandas traseras es eficaz pero un poco más duro que el de algunas alas de mayor nivel y las dos bandas y media híbridas que he volado recientemente. Para ser justo, en realidad no hace falta controlar el cabeceo. En cambio, es más para pilotar mientras se acelera y frenar dentro de ascendencias sin soltar el acelerador, que es muy eficaz. Le faltaba un poco de esa sensibilidad de las alas de mayor nivel, pero sigue siendo útil para pulir esas habilidades antes de subir de nivel.
Viento en contra por una cresta, me impresionó el rendimiento real que me permitió cruzar zonas de descendencia a pesar de las condiciones movidas. Durante otro vuelo, había varias inversiones que hicieron que las transiciones fueran un poco movidas. Un piloto con una EN-C me dijo que no tuvo tiempo de relajarse. Con la Knight 2 fue otra cosa: absorbe bien la turbulencia y los movimientos son un poco más lentos por lo que no sentirás que se te escapa y tendrás tiempo de reaccionar.
Tanto las térmicas como las descendencias eran marcadas, pero la vela se sentía sólida y confiable y siempre se mantuvo a la vertical sin cabecear.
El acelerador es útil en todo su recorrido y tiene más presión hacia el final del mismo. Al 100%, te da unos 11km/h adicionales con respecto a la velocidad manos libres. Como dije antes, el planeo empeora en los últimos centímetros, así que aceleré entre 50 y 75%.
La vela se siente bien sólida en vuelo. Sin embargo, hubo un día particularmente turbulento en el que tuve unos colapsos pequeños mientras giraba. El ala se portó muy bien y no cambió de rumbo ni cabeceó. Lo mismo sucedió cuando provoqué colapsos grandes: salieron sin complicaciones.
Perder altura
Hay tres líneas principales de cada lado y las A externas están en una banda separada para hacer orejas fácilmente. Tuve que usarlas airadamente mientras descendía a aterrizar porque el viento aumentó mientras volaba dentro de una convergencia.
Naturalmente, no son tan grandes como en alas con dos líneas principales, pero me parecieron más estables que en otras. Solo aletearon cuando induje unas oscilaciones con bastante peso del cuerpo, pero se calmaron rápidamente cuando dejé de moverme. Si se acelera, se mantiene la velocidad para que puedas escaparte de la ascendencia. Una vez que las sueltas, me pareció que salían lento – con un bombeo abren más rápido.
Durante las barrenas, fue fácil controlar velocidad del giro y el descenso con los frenos y al soltarlos un poco se libera bien la energía, así que no hay sorpresas durante la salida. Es fácil hacer wingovers pronunciados, pero es un ala para hacer distancia, no acrobacia.
Veredicto
Es un ala excelente para pilotos que quieran mejorar sus habilidades. Con esta ala, podrás aprender todas las técnicas necesarias mientras avanzas en el deporte sabiendo que cuidará de ti.
Con la atención obvia de sus diseñadores para mayor rendimiento, es un ala que no te frenará mientras aprendes. Tu progreso será recompensado con vuelos más largos porque el ala tiene rendimiento de alto nivel para su clase, sobretodo en transiciones movidas y en térmicas suaves.
Además de para pilotos novatos, si vuelas menos horas que antes pero sigues haciendo distancia y quieres la seguridad de una B baja, la Knight 2 es para ti.
especificaciones del fabricante
Lo que dice Triple Seven: «Las habilidades mejoran solo cuando tienes confianza en tu ala. Hicimos la Knight 2 con esta premisa sencilla»
Uso: Vuelo térmico y progresión al vuelo de distancia
Nivel del piloto: Principiantes ambiciosos
Tallas: XS, S, MS, ML, L
PTV homologado (kg): 60-73, 70-85, 80-95, 90-105, 100-119
Superficie plana (m2): 22, 24,1, 26,5, 28,2, 29,7
Peso del ala (kg): 4,4, 4,8, 5, 5,3, 5,5
Cajones: 54
Alargamiento plano: 5,2
Homologación: EN B