La turbulencia es el enemigo natural del piloto. La causa más conocida de la turbulencia es el sotavento y dudo que a nadie le guste volar en un rotor fuerte. Pero, debido a que el aire rara vez es laminar debemos aceptar la turbulencia – evitarla lo más que podamos, pero aceptarla donde sea inevitable”.
La turbulencia de rotor a gran escala puede encontrarse detrás de las montañas y a menor escala, detrás de obstáculos como árboles o casas. “Detrás” en este contexto siempre es “en el sotavento”.
Causa de la turbulencia
Las cizalladura e incluso las térmicas son otras causas, así como otras alas que pasen por delante. Las térmicas que rebotan contra una capa de inversión también generan turbulencia.
Generalmente, poco viento y térmicas suaves significan menos turbulencia, mientras que con viento y térmicas fuertes hay turbulencia fuerte y a veces extrema.
En turbulencia fuerte, un parapente podría colapsar y un ala delta, invertirse. En casos extremos, un piloto podría estrellarse.
Un ejemplo ilustrado podría ser un surfista montado sobre la cresta de la ola – si se cae, terminará dentro de agua turbulenta. Pero el aire es invisible, así que debemos conocer las causas de la turbulencia para poder evitarla; no podemos buscarla como el surfista.
Rotor de estabilo
Cuando observamos aviones aterrizando, generalmente veremos rotores en las puntas de las alas. Las estelas pueden verse durante varios minutos después de haber aterrizado el avión, pero estas estelas también pueden permanecer en el aire un buen rato.
Un avión enorme genera estelas extremas y un parapente o ala delta que vuele dentro de la misma se llevará una gran sorpresa.
Como pilotos de vuelo libre, estamos familiarizados con la turbulencia de las puntas de ala cuando pasamos detrás de otro piloto, sobretodo cuando volamos en una ladera pequeña con varios pilotos.
Detrás de obstáculos
Mientras más grande sea el obstáculo, mayor será la turbulencia y a mayor viento, mayor turbulencia. Con obstáculos pequeños como árboles o líneas de árboles, deberíamos aterrizar al menos a 100m de ellos. Si es una casa, lo mejor es aterrizar a un lado.
La intensidad de la turbulencia depende del terreno. Las laderas poco empinadas generan menos turbulencias que las empinadas. Si hay viento fuerte, la turbulencia detrás de un risco empinado podría extenderse varios kilómetros, pero en condiciones aptas para volar, la regla general es un kilómetro. Una zona cerca del obstáculo es peor que más lejos del mismo.
Detrás de los bordes
Detrás de los bordes de las laderas, la intensidad de la turbulencia depende de la inclinación de la ladera, la forma del borde y la velocidad del viento. Los pilotos aterrizan con frecuencia en laderas como esas, así que a continuación algunos consejos:
Con poco viento hay menos turbulencia, así que está bien aterrizar.
Mientras más empinada sea la ladera frente al borde, la zona de rotor se extenderá más lejos. Por no saberse exactamente qué tan lejos, es mejor no aterrizar detrás de laderas empinadas.
Si se desprenden térmicas de la ladera, hay que ser extremadamente cuidadoso. Si una térmica se desprende en el momento equivocado y aspira el aire de los lados (incluso de la cima plana donde intentas aterrizar) la situación puede tornarse fea rápido. Podría haber viento de cola y turbulencia/rotor al mismo tiempo, y que aterrices rápido y sin control. En casos como este es que suceden accidentes.
No te apures. Tómate tu tiempo para analizar el lugar, ve cómo otros pilotos aproximan. No busques acertar a la primera – la idea es hacerlo correctamente y suave, no meter el ala en pérdida.xs
Saca los pies en el momento adecuado.
Extracto de la edición más reciente de Thermal Flying de Burkard Martens (286pp, ISBN 9781838017361)